El ministro de Exteriores de Italia, Antonio Tajani, declaró a la prensa local que el expresidente brasileño Jair Bolsonaro no ha presentado ninguna solicitud para convertirse en ciudadano italiano.
“Jair Bolsonaro no ha pedido nuestra ciudadanía”, dijo el ministro a Rai Radio 1.
“Existen leyes que autorizan la ciudadanía; hay personas que tienen el derecho de convertirse en ciudadanos italianos si lo solicitan”, añadió antes de recordar que, en cuanto a la situación en Brasil, “el Gobierno de Meloni condenó de inmediato y con gran firmeza lo sucedido”.
Se refiere al asalto del Palacio de Gobierno, el Parlamento y el Supremo Tribunal este domingo 8 de enero.
Riesgo de arresto y extradición
La prensa brasileña y otros medios habían especulado que el expresidente Jair Bolsonaro podría estar intentando obtener la ciudadanía italiana por origen “para evitar el arresto y la extradición” a que estaría expuesto en EE. UU, país con el cual Brasil tiene acuerdos de extradición. Con Italia no los tiene.
Bolsonaro voló a Estados Unidos justo antes de la toma de posesión de Luiz Inácio Lula da Silva, quien lo derrotó en las urnas por breve margen. Mientras circulan imágenes que confirman la presencia del exmandatario en Orlando, Florida, es cuestión de tiempo que la justicia brasileña lo llame a rendir cuentas.
El origen de los rumores
En noviembre de 2022, medios de prensa en Brasil reportaron que sus hijos Eduardo y Flavio Bolsonaro se habían dirigido a la embajada italiana en Brasilia, que confirmó la presencia de Flavio en la sede consular.
Flavio Bolsonaro fue reelegido senador y su hermano Eduardo es miembro del Congreso. Su presencia en “territorio italiano” (la embajada), llamó la atención de los medios y levantó sospechas. El senador se ha sentido en la obligación de declarar que no tiene intención de salir del país.
“Tengo derecho a solicitar la ciudadanía, proceso que comencé en septiembre de 2019”, explicó.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Italia confirmó que dos de los cuatro hijos de Bolsonaro habían solicitado la ciudadanía en 2020 y que la solicitud aún está siendo procesada. Una fuente diplomática dijo que los consulados italianos en Brasil se habían visto inundados de solicitudes; es decir, podrían pasar años antes de que los aspirantes reciban un pasaporte italiano.
“El Gobierno de Italia debe ser claro. Ninguna ciudadanía para los hijos de Bolsonaro y el expresidente. Ninguna ciudadanía para los partidarios de los golpistas”, dijo el parlamentario de izquierdas Angelo Bonelli.
Desde que perdió las últimas elecciones, Bolsonaro y su familia han mantenido un perfil muy bajo, incluida poca presencia en las redes sociales. Hoy se conoció que el expresidente había sido hospitalizado en Florida por “fuertes dolores abdominales”; lo cual algunos también señalan como movida para eludir el retorno a Brasil.
Tras la agresión perpetrada por sus seguidores en Brasilia, la situación ha cambiado: el líder derechista ha sido señalado como principal instigador del asalto el domingo 8 de enero a la sede del Palacio de Gobierno, el Parlamento y el Supremo Tribunal.
Mientras tanto en Italia…
Los rumores sobre la posibilidad de que Bolsonaro se convirtiera en ciudadano italiano para escapar a los compromisos ante la justicia de su país tuvieron resonancia en la prensa de la península, que ya se refiere al tema como el “caso Bolsonaro”.
El presunto proyecto de fuga se perfilaba gracias a la existencia en la familia Bolsonaro de antepasados del Véneto (Anguillara Veneta) y toscanos (Lucca), que emigraron a América en el siglo XIX.
Antes de la declaración de Tajani hoy, se sabía que a Anguillara Veneta (un pueblo de 4 mil habitantes en la provincia de Padua, región Véneto) no había llegado ningún pedido formal de la familia Bolsonaro, si bien la alcaldesa leguista Alessandra Buoso había declinado hacer cualquier comentario sobre el tema.
Cuando Bolsonaro ganó las elecciones presidenciales en octubre de 2018, algunos consejeros regionales de la Liga Norte exhibieron un cartel que rezaba: “Orgullo del Véneto, presidente de Bolsonaro”.
Para los del Carroccio, como también se conoce el partido, era un homenaje al primer “conciudadano” en dirigir el país sudamericano. Para la centroizquierda italiana, por el contrario, se trató de una temeraria muestra de apoyo a un político de extrema derecha con pasado militar.
Ahora, el Partido Demócratico, los Verdes, el Movimiento 5 Estrellas y Refundación Comunista han vuelto a solicitar a la alcaldesa de Anguillara que le sea retirada la ciudadanía honorífica (estatus simbólico) que le fue concedida, entre grandes festejos y también protestas, el primero de noviembre de 2021.
Además, exigen que la Liga se desmarque del expresidente y en particular del asalto a las instituciones brasileñas por los bolsonaristas, ahora opositores al Gobierno de Lula Da Silva.
Los cargos que se le imputan a Bolsonaro
El brasileño Comité Especial del Senado sobre la Pandemia de COVID-19 estima que Jair Bolsonaro, como presidente, “contribuyó activamente a la propagación del coronavirus”. En Brasil la epidemia cobró la vida de más de 600 mil personas. El expresidente fue incriminado con el delito de “homicidio de masas”.
Uso indebido de fondos públicos, divulgación de datos confidenciales, interferencia indebida en la Policía Federal, violación de derechos sociales y crímenes de lesa humanidad, son otros de los delitos que penden sobre él.
Mientras estuvo en el cargo de presidente, Bolsonaro solo podía ser objeto de investigaciones criminales previa autorización del Supremo Tribunal Federal (STF). Solamente la Procuraduría General de la República (PGR) podía denunciarlo, para lo cual se necesitaba además ser autorizada por la Cámara de Diputados.
Por otra parte, ningún tribunal que no fuera el STF podía procesarlo. Al dejar de encabezar el Gobierno, el expresidente queda a disposición de la justicia común y cualquier fiscal está habilitado para presentar cargos en su contra.