El presidente de Ecuador Daniel Noboa podrá ratificar, sin necesidad del aval de la Asamblea Nacional, el acuerdo mediante el cual se autoriza la presencia de personal civil y militar de Estados Unidos en el país.
La medida había sido firmada por el expresidente Guillermo Lasso.
Según Prensa Latina, el organismo judicial determinó que no es necesario que el Parlamento discuta los tratados que serán devueltos a la presidencia para continuar con el trámite correspondiente a su entrada en vigor.
De acuerdo con lo pactado por Quito y Washington, se otorgan privilegios al personal militar y civil del país norteño con exenciones e inmunidades, equivalentes a la del personal diplomático. En particular, uno de los artículos plantea que “el personal de Estados Unidos podrá entrar y salir del territorio de la República del Ecuador con identificación estadounidense”.
Asimismo, Ecuador renuncia a la posibilidad de juzgar infracciones cometidas por el personal militar o civil de Estados Unidos, cuyo gobierno podrá ejercer jurisdicción penal sobre esas personas mientras estén en el territorio de ese país.
Las aeronaves, los buques y los vehículos operados por el Departamento de Defensa podrán entrar, salir y desplazarse libremente por Ecuador. Incluso, si necesitan utilizar el espacio radioeléctrico, tiene total libertad para operar sus propios sistemas de telecomunicaciones, señala la normativa.
Esta decisión tiene lugar en el contexto de una visita a Quito de una delegación de altos funcionarios norteamericanos, incluida la jefa del Comando Sur, Laura Richardson.
Prensa Latina indica que autoridades de ambos países anunciaron el arribo a Ecuador de equipamiento militar estadounidense y de personal del Buró Federal de Investigaciones (FBI). Ello, según el reporte, buscando “contribuir a la lucha contra el crimen organizado en el marco del conflicto armado interno”.
Analistas consideran que Washington podría profundizar su presencia militar en Ecuador a propósito de la crisis de seguridad que atraviesa el país y la narrativa oficial de se vive ahora en guerra contra el narcotráfico.
Citada por EFE, la canciller Gabriela Sommerfeld, dijo que serán las autoridades militares las que definan desde cuándo se implementarán estos tratados bilaterales.