El Tribunal Federal Supremo de Brasil ratificó hoy la decisión anulando las condenas contra el expresidente Luis Inácio Lula da Silva, quien recuperó sus derechos políticos y podrá participar en las elecciones de 2022.
De los once jueces que integran el Tribunal, ocho estuvieron de acuerdo en mantener la invalidez de las sentencias contra el fundador del Partido de los Trabajadores. Tres estuvieron en contra.
La mayoría de los ministros del Supremo reconoció la incompetencia del décimo tercer Tribunal Federal de la sureña ciudad de Curitiba para juzgar los casos contra Lula.
La decisión, muy esperada, se produjo después de que el juez de la Corte Suprema, Edson Fachin, determinara a principios de marzo que el tribunal federal inferior donde se juzgó a Lula carecía de jurisdicción para ello, decisión apelada por el principal fiscal de Brasil.
Lula, de 75 años, gobernó el país y la economía más grande de América Latina entre 2003 y 2011. En 2018, fue condenado bajo cargos de aceptar sobornos de empresas de ingeniería a cambio de contratos públicos. Pasó un año y medio tras las rejas hasta que la Corte Suprema dictaminó que él y otros podían apelar sus casos sin cumplir condena.
Lula mantuvo su inocencia y que el caso en su contra había sido una conspiración políticamente motivada.
Con las condenas anuladas, Lula es elegible para postularse una vez más y es el favorito entre los oponentes de Bolsonaro para enfrentarse al líder de la derecha en 2022.
Sondeos recientes muestran que tiene el 52% de la intención de votos contra un 34% del presidente Jair Bolsonaro en una posible segunda vuelta en los comicios presidenciales del próximo año.