La tasa de natalidad de Estados Unidos alcanzó el año pasado mínimos históricos para mujeres adolescentes y jóvenes, con lo que la cifra a nivel nacional disminuyó a niveles no vistos en 32 años.
El reporte provisional, difundido este miércoles en base a más del 99% de los registros de nacimientos del país, halló que hubo 3,788 millones de nacimientos el año pasado. Es el cuarto año consecutivo en que disminuye la tasa de natalidad, más baja desde 1986 y una sorpresa para muchos expertos dado el buen estado de la economía.
La tasa de fertilidad de 1,7 hijos por cada mujer en Estados Unidos disminuyó 2%, lo que significa que la generación actual no está produciendo suficientes bebés para reemplazarse. La tasa de fertilidad es un estimado hipotético basado en proyecciones sobre tasas de natalidad.
Lo que no queda claro es si las mujeres estadounidenses están postergando la maternidad, o descartándola del todo.
La natalidad en Estados Unidos, por los suelos. En 2018:
-Se alcanzó el mínimo histórico de tasa de fecundidad (hijos por mujer).
-Hubo el menor número de nacimientos desde 1986, cuando el país tenía 27% menos población.https://t.co/8DfOoty7SK— Renac. Demográfico (@ren_demografico) May 15, 2019
Si la tendencia se mantiene, dicen expertos, podría ocurrir una escasez de mano de obra incluso en el sector de atención geriátrica, sumamente importante para la generación de la posguerra que está ahora entrando en la vejez.
“Siempre estoy anticipando un aumento de la tasa de natalidad pero no ocurre”, declaró Kenneth M. Johnson, demógrafo de la Escuela Carsey de Políticas Públicas de la Universidad de Nuevo Hampshire.
Estima que 5,7 millones de bebés habrían nacido en la década pasada.
“Son muchas aulas de kindergarten que quedaron vacías”, expresó Johnson, quien no estuvo involucrado en el estudio reciente.
Otros expertos parecen despreocupados y vaticinan que las mujeres jóvenes eventualmente tendrán sus bebés. Los únicos dos grupos demográficos con tasas de natalidad levemente mayores en el 2018 fueron las mujeres de entre 35 y 40, y las de entre 40 y 45 años de edad.
“Nuestra tasa de fertilidad sigue siendo bastante alta para una nación acaudalada”, manifestó Caroline Sten Hartnett, demógrafa en la Universidad de Carolina del Sur.
Las mujeres estadounidenses están empezando a tener hijos antes que las de otras naciones desarrolladas, de acuerdo con otras investigaciones. También en otros países está disminuyendo la tasa de natalidad.
Los jóvenes estadounidenses sí quieren tener hijos, pero no se sienten con la estabilidad financiera necesaria para hacerlo, apuntó Karen Benjamin Guzzo, experta en asuntos familiares en la Universidad Bowling Green de Ohio.
Estados Unidos podría tomar más medidas para facilitar la creación de familias si aprobara mejores permisos de maternidad y subsidios para el cuidado infantil, opinó Guzzo.