Rui Ferreira
El gobierno de EE.UU. ha autorizado el reinicio de las operaciones de los cruceros turísticos en junio, una vez que puedan comprobar que el 95% de las personas a bordo, pasajeros y tripulación, se encuentran vacunados contra la COVID-19 y libres de contaminación. Sin embargo, ninguno de esos viajes incluye a Cuba, confirmaron medios locales.
El primero en zarpar, de Port Everglades —el segundo puerto de cruceros en Florida—, además de Miami, será el Celebrity Edge, de la compañía Celebrity Cruises, con capacidad para 2.918 pasajeros.
La certificación sanitaria deberá ser otorgada por el gobierno de Florida, cuyo gobernador ha prohibido exigir certificados de vacunación, incluyendo a entidades privadas, pese a que el gobierno federal no comparte esta opinión. Esta discordancia podría dificultar el cumplimiento de las instrucciones impartidas al respecto por el Centro de Centro de Control de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés).
El mes pasado, la procuradora general de Florida, Ashley Moody, respaldada por el gobernador Ron DeSantis, presentó una demanda contra las restricciones establecidas a la industria de cruceros, y un juez federal ordenó crear un equipo de “mediación” para solucionar el problema antes del 1 de junio.
Entretanto, la empresa Royal Caribbean comenzará a navegar próximamente entre Seattle y Alaska. Otras compañías planean realizar viajes previo cumplimiento del uso de documentos de vacunación.
Líneas de crucero quieren reanudar los viajes con todos los pasajeros y tripulantes vacunados
Los cruceros fueron interrumpidos el 15 de marzo del año pasado, tras declararse la pandemia de coronavirus. Desde entonces, tras el paso de tres grandes olas de contagios, que suman hasta ahora cerca de 34 millones de positivos detectados y más de 606.000 muertes en Estados Unidos, el índice de contaminación ha disminuido, gracias principalmente a la campaña de vacunación en marcha.
Los cruceros de Estados Unidos a Cuba comenzaron en mayo de 2016, tras el deshielo entre los dos países, pero fueron prohibidos en junio de 2019, luego de la ascensión del expresidente Donald Trump a la Casa Blanca, lo que tuvo un indiscutible impacto en la iniciativa privada en la Isla, sobre todo en la vinculada al sector del turismo.
Ahora, pese a los reclamos para reanudar los viajes a Cuba y, en sentido general, el acercamiento entre ambos países, el presidente Joe Biden mantiene sin cambios la política de su antecesor hacia la Isla, en este y otros sectores.
