Una directriz que suspende el desalojo de ciertos inquilinos hasta el final de 2020, con la finalidad de evitar la propagación del nuevo coronavirus, fue emitida ayer martes por gobierno del presidente Donald Trump.
El gobierno federal, así como los gobiernos estatales y locales, han aprobado moratorias sobre desahucios durante el transcurso de la pandemia para muchos inquilinos, pero esas protecciones expiran pronto.
Un reporte reciente del Instituto Aspen, un centro de investigación, señaló que más de 20 millones de arrendatarios viven en hogares que han sufrido pérdida de empleos a causa del COVID-19 y concluyó que millones más están en riesgo de ser desalojados en los próximos meses.
https://twitter.com/AspenInstitute/status/1300482482295332865
La medida del gobierno se deriva de una orden ejecutiva que el presidente Trump emitió a principios de agosto en la que instruyó a funcionarios federales de salud a considerar medidas para suspender de manera temporal los desahucios.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés) respondieron el martes a esa instrucción declarando que ningún arrendador debe desalojar a una “persona cubierta” de ninguna propiedad residencial por no pagar el alquiler.
Funcionarios gubernamentales de alto rango explicaron que el director de los CDC cuenta con una amplia autoridad para tomar acciones que se consideren razonablemente necesarias para prevenir la propagación de una enfermedad contagiosa.
Los inquilinos cubiertos por la orden ejecutiva deben cumplir cuatro requisitos:
-Tener un ingreso máximo de 198 000 anuales para parejas que presentan una declaración fiscal conjunta, o 99 000 dólares para los contribuyentes solteros.
-Demostrar que han buscado ayuda del gobierno para realizar sus pagos de alquiler.
-Declarar afirmativamente que no pueden pagar la renta a causa de las dificultades provocadas por el COVID-19.
-Afirmar que es probable que se queden sin hogar si son desalojados.
Los funcionarios dijeron que los tribunales locales aún resolverían las disputas entre inquilinos y propietarios sobre si la moratoria es válida para un caso particular.
Brian Morgenstern, subsecretario de prensa de la Casa Blanca, señaló que el anuncio del martes significa que las personas con problemas para pagar el alquiler a causa de la pandemia no tendrían que preocuparse de ser desalojadas y correr el riesgo de propagar la enfermedad o exponerse a ella.
Diane Yentel, presidenta y directora general de la Coalición Nacional de Viviendas para Personas de Bajos Ingresos, dijo que la orden brindará ayuda a millones de familias preocupadas, pero añadió que la medida posterga los desahucios, en lugar de impedirlos.
“Aunque una moratoria a los desahucios es esencial, es una medida insuficiente que extiende un precipicio financiero para que los inquilinos caigan en él una vez que expire la moratoria y vuelvan a deber el alquiler”, tuiteó Yentel.
AP/OnCuba