Redacción OnCuba
El exfiscal federal Glenn Kirschner acusó al expresidente Donald Trump de cometer delitos “a la luz del día“ y reiteró sus llamados a procesarlo. Kirschner expresó su frustración por el hecho de que Trump no haya enfrentado una acusación por ninguna de sus fechorías a lo largo de los años.
Durante una entrevista con la cadena MSNBC le preguntaron si Trump podría enfrentar consecuencias similares a las de su exasesor, Steve Bannon, quien este jueves se entregó a las autoridades de Nueva York después de ser acusado de defraudar a los donantes de una organización involucrada en construir el muro fronterizo con México.
Bannon está acusado de defraudar alrededor de 15 millones de dólares a miles de donantes a la iniciativa de recaudación de fondos We Build the Wall, que ayudó a ejecutar. Acusado en una investigación federal casi idéntica antes de ser indultado por Trump, ahora se declaró inocente de dos delitos graves de lavado de dinero, dos delitos graves de conspiración y un delito grave de esquema para defraudar después de entregarse a los fiscales de la Oficina del Fiscal del Distrito de Manhattan.
“Esto puede sonar sorprendente viniendo de un exfiscal. A veces quiero gritar: ‘Basta de nuevas investigaciones’“, dijo Kirschner. “Quiero decir, sí, tenemos que investigar todos los crímenes de Donald Trump, pero esta nueva investigación… ¿eso nos va a distraer de la investigación sobre su robo de documentos clasificados?“.
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Trump ha negado repetidamente cualquier irregularidad con respecto a los documentos, incluso al decir que todos los documentos clasificados que tomó habían sido desclasificados. A principios del mes pasado, agentes del FBI registraron su residencia de Mar-a-Lago y confiscaron documentos de alta secretividad y otros materiales clasificados que tenía en su poder.
Kirschner citó numerosos delitos y conductas indebidas de los que el expresidente ha sido acusado en el pasado, durante y después de su presidencia, incluidas acusaciones de intento de cometer fraude electoral en Georgia a raíz de las elecciones de 2020 y la extorsión de un funcionario extranjero. Kirschner finalmente expresó una frustración considerable por la falta de acusación de Trump hasta el momento. “Lo que parece habernos distraído de su lanzamiento [de] una insurrección armada. Lo que parece habernos distraído de su fraude electoral en Georgia… y todo eso ciertamente nos distrajo de su soborno y extorsión al presidente [Volodymyr] Zelensky [de Ucrania], sus 10 cargos de obstrucción de la justicia documentados en el informe Trump-Rusia, sus crímenes de financiamiento de campaña con Michael Cohen al comienzo de todo lo que usó para robar la presidencia“.
“En algún momento, ¿podremos decirle al Departamento de Justicia que simplemente termine lo que comenzó? Simplemente, que presente una acusación contra alguien que ha estado delinquiendo a la luz del día“, dijo.
Un Gran Jurado Federal Especial también está investigando los esfuerzos de Trump para recaudar fondos a raíz de su derrota en 2020 y sus esfuerzos posteriores para socavar los resultados de las elecciones.
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El mismo día en que Bannon se entregó, varios medios informaron que ese Gran Jurado había emitido citaciones destinadas a descubrir el funcionamiento interno del PAC de liderazgo de Trump, Save America, incluidas consultas sobre su formación, esfuerzos de recaudación de fondos y gastos. Bannon está acusado de defraudar alrededor de 15 millones de dólares de miles de donantes a la iniciativa de recaudación de fondos We Build the Wall que ayudó a ejecutar. Bannon, quien previamente fue acusado en una investigación federal casi idéntica antes de ser indultado por Trump, se declaró inocente de dos delitos graves de lavado de dinero, dos delitos graves de conspiración y un delito grave de esquema para defraudar después de entregarse a los fiscales de la Oficina del Fiscal del Distrito de Manhattan.
Algunos creen que el Departamento de Justicia (DOJ) no acusará al expresidente de nada hasta después de las elecciones de medio término, ahora en noviembre. Esto se debe a una tradición no oficial en la que el Departamento evita tomar esas acciones 60 días antes de una elección.
