Este miércoles la ciudad de Miami amaneció bajo un toque de queda indefinido debido al coronavirus. Muchos de sus ciudadanos se sorprendieron porque la orden se dio al final de la tarde y se divulgó más en los últimos noticieros del día, a las 11 de la noche, cuando ya mucha gente estaba durmiendo.
En un comunicado y un tuit el alcalde Francis Suárez ordenó el toque de queda a partir de la medianoche de ayer, pero no establece una fecha final. Apenas especifica que es hasta nuevo aviso. “Estamos poniendo una orden de quedarse en casa”, dijo. El asunto fue tema de discusión en la alcaldía de la ciudad desde la semana pasada, después de que Miami Beach adoptara la misma decisión, pero a tiempo parcial, entre las once de la noche y las cinco de la mañana. En el video el alcalde dijo que entre los concejales hubo serias divergencias que no especificó. Al final, el voto de dos de ellos y el del alcalde impusieron la voluntad de Suárez.
“He estado tratando de hacerlo durante la última semana. Desafortunadamente, he estado obteniendo resistencia internamente, pero gracias al comisionado [Alex] Díaz de la Portilla y otros que han sido tan útiles, vamos a implementarlo hoy y a esperar que la gente reciba el mensaje de quedarse en casa, y si vienes para las vacaciones de primavera, regresa a casa”, afirmó Suárez. La comisión de la ciudad cuenta con cinco miembros, incluyendo el alcalde. Como el alcalde se encuentra encerrado en su casa por haber dado nuevamente positivo a la prueba del coronavirus, el administrador de la ciudad, Arthur Noriega, fue quien firmó la orden ejecutiva.
Yesterday, I was retested as part of the official process to be released from quarantine. Here are my results as well as some major announcements regarding new testing and safety measures in the @CityofMiami. pic.twitter.com/EuEhtAJxGr
— Mayor Francis Suarez (@FrancisSuarez) March 24, 2020
A su vez, al final de la tarde del miércoles, el alcalde de ciudad El Doral, dentro del área metropolitana de Miami, siguió el ejemplo de su colega de Miami y decretó también el toque de queda indefinido en su área geográfica. “Es una medida necesaria para priorizar la seguridad de nuestros residentes y negocios y detener la propagación del COVID-19”, justificó el alcalde Juan Carlos Bermúdez en un comunicado la medida restrictiva que le da libertad a los residentes para apenas salir a la calle en busca de alimentos y servicios esenciales o asistir a sus trabajos autorizados por las las autoridades. Un empleado de la alcaldía de El Doral dijo a OnCuba que en los próximos días la municipalidad dará más detalles.
Esta mañana del primer día de encierro no voluntario, muchos miamenses dijeron a OnCuba que fueron cogidos por sorpresa; algunos no estaban muy contentos con la decisión. “Yo entiendo el peligro de la situación, pero el alcalde debía habernos dado más tiempo para organizarnos. Darnos apenas poco más de cuatro horas me parece increíble. Esperar un día no parece que haga mucha diferencia. Acá en el consultorio hemos pasado la mañana rechazando pacientes y desmarcando turnos para los próximos días. Solo atendemos casos urgentes”, explicó telefónicamente el doctor Marcos Zamora, titular de una clínica de barrio.
En Kendall, que pertenece al condado y no la ciudad, las opiniones están divididas. “Me parece una actitud muy acertada del señor alcalde. Todos debemos estar en casa y salir solo en casos de necesidad. Nadie nos va ayudar a evitar esto, solo nosotros”, opinó Claudia Castillo, ama de casa colombiana que acudió a una farmacia en busca de máscaras y alcohol. No los encontró porque ambos productos, ahora de primera necesidad, han desaparecido desde hace más de diez días. Al constatar su ausencia, dijo que piensa pedirle a su familia en Bogotá que se los manden por correo.
Los supermercados y establecimientos esenciales siguen abiertos. Pero los primeros casi no tienen clientes porque escasean los productos alimenticios. La carne prácticamente ha desaparecido, así como los enlatados y la leche. Los huevos y la mantequilla entran a cuentagotas. El pan todavía no es un problema, solo los productos congelados todavía no lo son. No hay problemas con las verduras porque la Florida es un estado agrícola y los mercados se mantienen abastecidos, explicaron dos administradores de dos cadenas diferentes.
“El desabastecimiento se debe principalmente a los productos que vienen fuera del estado. Los choferes me han dicho que las empresas productoras están teniendo problemas con el personal, no les alcanza y quedan productos en almacenes porque no tienen manera de sacarlos. La carne de res y el pollo son un problema por eso mismo. Lo que se produce en Florida no alcanza para todos los clientes”, dijo uno de los administradores. “La gente se ha puesto histérica con la carne. He tenido casos de clientes que se han llevado más de 200 dólares en filetes, eso es una cantidad monstruosa, se les van a echar a perder a menos que la familia sea de veinte personas. Ridículo”, agregó.
Las reglas del toque de queda en la zona de Miami son un poco más duras que en el resto del condado Miami-Dade. Todos los desplazamientos se encuentran virtualmente prohibidos, sea en automóvil, taxi, bicicletas, motocicletas, transportes públicos en general, exceptuando en situaciones como la necesidad de abastecerse de comestibles, ida al médico o a servicios esenciales a las residencias, bien para reparaciones, cuidar el jardín o mantener las piscinas. Sigue autorizado el ejercicio al aire libre, exceptuando los parques públicos, cerrados por el condado o por el gobernador del estado.
Y para hacer cumplir el encierro, la alcaldía ha dado poderes excepcionales a las autoridades policiales. Los violadores se arriesgan a ser arrestados durante 60 días y recibir multas de 500 dólares. Paralelamente, el alcalde del condado Miami-Dade, que incluye a la ciudad de Miami, tras escuchar la decisión de Suárez prohibió a grupos de más de diez personas juntarse en las calles. En Miami-Dade todavía no impera el toque de queda, como en Miami. “No es nada extraordinario. El presidente Trump ya ha dicho lo mismo”, justificó el alcalde del condado, Carlos Giménez.
Según el Departamento de Salud de la Florida, durante las últimas 24 horas se han disparado los casos de coronavirus. El martes eran 1.412 enfermos y hoy ascienden a 1.682, una progresión de 200 diarios. En los condados de Miami-Dade suman ya 400 y en el condado colindante al norte, Broward, son 365, mientras que al sur, en el condado Monroe, solo hay uno.