El expresidente brasileño Jair Bolsonaro fue ingresado en un hospital de Orlando, Florida, con dolor abdominal, reportó el lunes el periódico O Globo un día después de que sus partidarios irrumpieran en edificios públicos y del gobierno en Brasilia.
En los últimos años Bolsonaro ha sido hospitalizado varias veces con obstrucciones intestinales luego de ser apuñalado mientras hacía campaña por la presidencia en 2018.
En noviembre pasado fue ingresado en el Hospital de las Fuerzas Armadas en Brasilia.
Su esposa, Michelle Bolsonaro, recurrió a las redes para aclarar detalles de su ingreso: “Estimados, vengo a informarles que mi esposo Jair Bolsonaro se encuentra en observación en el hospital debido a molestias abdominales producto de las secuelas de la herida de arma blanca que se le propinó en 2018”.
“Estamos orando por su salud y por Brasil. Dios nos bendiga”, agregó.
Una fuente cercana a la familia había dicho que su estado “no es de preocupación“.
El exgobernante viajó a Estados Unidos dos días antes de que Luiz Inácio Lula da Silva asumiera la presidencia de la nación sudamericana.
Bolsonaro supuestamente se estaba quedando en la casa de José Aldo, un luchador profesional brasileño retirado. Ambos fueron retratados en esa casa, ubicada en Orlando a unas pocas millas de Disney World.