El gobernador de Florida, Ron DeSantis, ha sido derrotado de nuevo por un juez federal que este martes ordenó suspender la aplicación de una ley sobre el cuidado de afirmación de género para jóvenes transgénero, a pedido de tres familias que la impugnan.
El caso empezó con una demanda presentada contra las juntas médicas estatales y el cirujano general Joseph Ladapo por un grupo de padres de Florida y sus hijos transgénero. Enmendaron una demanda en mayo a fin de buscar una orden judicial sobre el proyecto de ley que el gobernador Ron DeSantis promulgó y que convirtió en ley las restricciones de las juntas médicas.
Según la orden judicial, tres de los siete padres que desafiaron la movida solicitaron una orden judicial en la que pudieran acceder a la atención de sus hijos transgénero mientras continuaba el desafío legal. El juez federal de distrito Robert Hinkle dijo que era probable que los padres ganaran el caso.
Los demandantes afirmaron que la ley, ya en vigencia, viola la cláusula de igual protección de la Enmienda 14 porque le impide a los menores transgénero obtener la atención médicamente necesaria. Las prohibiciones también negaron los derechos de los padres a tomar decisiones médicas para sus hijos.
Las restricciones de las juntas de Medicina y Medicina Osteopática de Florida prohibieron a los médicos recetar bloqueadores de pubertad, terapias hormonales y cirugías para tratar a nuevos pacientes menores de 18 años por disforia de género, esto es, la angustia que se siente con el sexo con el que se nace. Quienes ya tomaban los medicamentos fueron protegidos. Se les permitió continuar con la atención especializada.
El proyecto de ley que firmó DeSantis, el SB 254, prohibió el tratamiento de menores con disforia de género y requirió que las juntas establecieran reglas de emergencia.
En una orden de 44 páginas, Hinkle dijo que se debe tener en cuenta el “elefante en la habitación” y que “la identidad de género es real”. Destacó, por otra parte, que la “sugerencia tácita que se encuentra justo debajo de la superficie”, la que condujo a adoptar las prohibiciones, es que la identidad transgénero no es real, y criticó a algunos de los expertos del estado por respaldar esa idea.
“Cualquier proponente del estatuto y las reglas impugnadas debería callarse: ¿reconoce que hay personas con identidades de género reales opuestas a su sexo natal, o no?” escribió el juez.
El juez también dijo que el estatuto y las reglas toman “la misma decisión para todos, sin considerar las circunstancias individuales de ningún paciente”, en vez de permitir que los implicados y sus médicos evalúen los riesgos y beneficios del tratamiento médico.
Los grupos que presentaron el caso, entre ellos Southern Legal Counsel, GLBTQ Legal Advocates & Defenders, National Center for Lesbian Rights y Human Rights Campaign, emitieron una declaración conjunta.
“El fallo de hoy es una poderosa afirmación de la humanidad de las personas transgénero, la eficacia de la atención médica bien establecida y basada en la ciencia, y de los derechos de los padres a tomar decisiones informadas sobre la atención médica de sus hijos”, dijeron.
“El tribunal reconoció el daño profundo que está causando el estado de Florida al obligar a los padres a ver sufrir a sus hijos en lugar de brindarles una atención segura y eficaz que les permita prosperar. Estamos increíblemente aliviados de que estos padres puedan continuar recibiendo atención médica para sus hijos mientras procedemos a desafiar estas prohibiciones hasta, finalmente, verlas anuladas por completo“, concluyeron.