Un poderoso sistema de tormentas que avanzó por el sur de Estados Unidos causó la muerte de una niña de ocho años en Florida y trajo tornados a las Carolinas y Virginia.
Un árbol cayó el viernes sobre una casa en Woodville, Florida, al sur de Tallahassee, donde causó la muerte de la menor, además de herir a un chico de 12 años, según la oficina de sheriff del condado de Leon.
La oficina dijo en un comunicado que la niña falleció en un hospital y que el chico sufrió lesiones que no ponían en peligro su vida. Los nombres de ambos no fueron dados a conocer de momento.
Las muertes el día anterior de tres personas en Mississippi y de una mujer en Alabama fueron atribuidas al mismo sistema de tormentas.
Los temporales representaron un peligro para la zona este, donde las autoridades emitieron advertencias de tornado para partes del noreste de Georgia, las Carolinas y Virginia, donde se reportaron cuatro presuntos tornado el viernes por la noche.
Los tornados ocurrieron en Reston, Fredericks Hall, Barham y Forksville. Varias casas y pequeñas estructuras sufrieron daños, pero no se informó de inmediato que hubiera heridos.
El Centro de Predicción de Tormentas, de nivel nacional, dijo que 9,7 millones de personas en las Carolinas y Virginia enfrentaron un riesgo leve de mal clima. La región abarcaba la zona metropolitana de Charlotte, en Carolina del Norte.
Lluvias torrenciales, fuertes granizadas y algunos tornados se contaban entre los peligros, dijo el Servicio Nacional de Meteorología en Raleigh, Carolina del Norte.
Las lecturas del radar parecían mostrar que un tornado se había formado en el condado de Franklin, al oeste de Virginia, y al sur de Roanoke, aunque los daños no habían sido valorados aún, dijo el experto Phil Hysell, del Servicio Nacional de Meteorología.
En Carolina del Sur, las autoridades instaron a los automovilistas a evitar parte de la Interestatal 26, la arteria principal desde el norte del estado a través de Columbia y hasta Charleston, porque los árboles caídos habían dejado la carretera salpicada de escombros.
En Georgia, el sistema de tormentas derribó árboles, causó inundaciones y dejó sin electricidad a decenas de miles de habitantes.
Un árbol cayó en un complejo de apartamentos en un suburbio de Atlanta, pero sólo una persona sufrió lesiones menores y fue atendida en el lugar, dijo el portavoz de los bomberos del condado de Gwinnett, el capitán Rommy Rutledge, al periódico Atlanta Jornal-Constitution.
En el condado de Forsyth, al noreste de Atlanta, tres bomberos sufrieron lesiones menores tras volcarse su vehículo en medio de un aguacero y ventarrones, informó al periódico el jefe de bomberos, Jason Shivers.
Mientras tanto, cientos de personas limpiaron parte de una ciudad del centro de Mississippi que fue fuertemente golpeada por un tornado el jueves.
Voluntarios y residentes abarrotaron el lado norte de Morton, donde el Servicio Meteorológico Nacional dijo que un tornado con vientos de hasta 212 km/h golpeó un vecindario.
Más de 20 viviendas resultaron dañadas gravemente o destruidas. El pueblo de 3,500 personas está a unos 48 kilómetros al este de Jackson.
Cuando se detuvo, no quedó nada”, dijo Sharon Currie, residente de Morton, a la televisora WAPT-TV. “Yo pensaba: ‘¡Dios mío! ¡Mi casa se fue!’”.