El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo este jueves que sus ideas respecto a Cuba y Venezuela son “más duras” que las de su recién despedido asesor de seguridad nacional, John Bolton, y que este le “contenía” para no tomar medidas más severas.
“Mis ideas sobre Venezuela, y en especial sobre Cuba, eran mucho más duras que las de John Bolton. ¡Él me estaba conteniendo!”, escribió Trump en su cuenta de Twitter.
Trump matizó así las declaraciones que hizo este miércoles en respuesta a una pregunta de Efe en el Despacho Oval, donde dijo que él estaba “en desacuerdo con John Bolton en sus actitudes sobre Venezuela”.
“Creo que se pasó bastante de la raya, y creo que se ha demostrado que yo tenía razón”, agregó entonces Trump.
Ese comentario pareció inquietar al senador republicano Marco Rubio, quien tuiteó este jueves que habló por teléfono con Trump sobre la política estadounidense hacia Venezuela.
“Es cierto que (Trump) estaba en desacuerdo con algunas opiniones de su asesor anterior. Pero, como me recordó, (lo que piensa) en realidad es DIRECTAMENTE LO CONTRARIO de lo que muchos aseguran o asumen”, escribió Rubio.
“Si, de hecho, acaba cambiando la dirección de la política hacia Venezuela, no será para debilitarla”, añadió el senador por Florida, que es una de las figuras más influyentes en la política de Trump hacia Latinoamérica.
El breve tuit de Trump defendiendo su línea dura en Venezuela fue una respuesta al mensaje publicado unas horas antes por Rubio.
En sus comentarios de este miércoles en el Despacho Oval, Trump evitó aclarar si su doctrina en lo relativo a Venezuela podría cambiar ahora que Bolton ha abandonado su cargo, y se limitó a indicar que tiene una “política firme” hacia ese país.
“Venezuela está pasándolo realmente mal, y estamos tratando de ayudarles de una forma humanitaria”, afirmó Trump.
El mandatario insinuó que su prioridad es esa asistencia y no “aplastar al régimen terrible” del presidente venezolano, Nicolás Maduro, como quería Bolton.
Sin embargo, con su nuevo tuit tras hablar por teléfono con Rubio, que apoyaba la estrategia de Bolton, el mandatario dio señales de que está dispuesto a seguir adelante con la campaña para derrocar a Maduro.
En los últimos meses, Trump ha dado señales de frustración por la falta de resultados en la estrategia hacia Venezuela, después de que Estados Unidos iniciara en enero una campaña internacional para aupar al poder al opositor Juan Guaidó.
El mandatario acusó el pasado mayo a Bolton de querer meterle “en una guerra” en Venezuela, según informó entonces el diario The Washington Post.