Donald Trump lo ha vuelto a prometer: si gana las elecciones presidenciales de 2024 arremeterá contra los inmigrantes, una de las dianas favoritas de su política, primero como presidente y ahora como aspirante republicano.
Fiel a su grandilocuencia, el exmandatario no habla de cierres y operaciones convencionales, sino no de “la más grande y masiva” deportación de inmigrantes en Estados Unidos.
Así lo ha venido diciendo como parte de su campaña para conquistar la candidatura de su partido a la Casa Blanca, y así lo reiteró este sábado en un mitin en New Hampshire, a poco menos de seis semanas de que se realicen las primarias en ese estado.
Trump, amplio favorito para la nominación presidencial republicana para las elecciones del próximo año, usó nuevamente el tema migratorio para sumar adeptos a su base de incondicionales seguidores.
“En mi primer día de regreso a la Casa Blanca voy a poner fin a todas las políticas de fronteras abiertas de la Administración Biden, voy a parar la invasión por la frontera sur y comenzaré la más grande y masiva operación de deportación en el país”, dijo, citado por la agencia EFE.
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De acuerdo con el medio español, el republicano no dedicó mucho tiempo a dar detalles sobre su plan de deportación, aunque sí a arremeter en general contra el presidente Joe Biden y sus políticas migratoria y exterior.
Trump —quien lleva adelante su campaña a la par que enfrenta varias demandas y batallas judiciales que tensan su posible nominación— reiteró su promesa antiinmigrante justo cuando el Gobierno de Biden está en negociaciones con senadores de la oposición para endurecer el sistema de asilo a cambio de que le apoyen un gasto de más de 60.000 millones de dólares para Ucrania.
La frontera sur de Estados Unidos vive por estos días un mayor flujo de migrantes, especialmente en Arizona. Ello ha obligado a la gobernadora de ese estado, la demócrata Katie Hobbs, a enviar a la Guardia Nacional, apunta EFE.
Un mes atrás el propio Trump y fuentes cercanas a él, citadas por medios de prensa, adelantaron que el expresidente implementaría una “expansión generalizada” de sus políticas de inmigración de línea dura de su anterior gobierno si es reelegido para un segundo mandato el próximo año.
Esta política incluiría la detención de inmigrantes indocumentados que ya se encuentran en EE.UU. y su colocación en campos de detención a la espera de su deportación, según confirmó una fuente a la cadena CNN.
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Los planes, también reportados por el New York Times, conllevarían la construcción de grandes campamentos para albergar a los inmigrantes que serán deportados, así como “recursos para que las fuerzas policiales federales y locales ayuden con arrestos a gran escala de inmigrantes indocumentados en todo el país”.
De acuerdo con la fuente citada por la CNN, si el Congreso se negase a financiar esta operación, Trump podría recurrir a una táctica utilizada ya por él en su primer mandato para asegurar más fondos para el polémico muro fronterizo: redirigir fondos del Pentágono a estos fines.
No obstante, los propios reportes de prensa señalaron que “los planes de Trump —en caso de seguir adelante con ellos si recupera el poder— enfrentarían feroces desafíos políticos y legales”.