Donald Trump dijo este jueves estar listo para reanudar los mítines de campaña, y alegó sentirse “perfecto” a una semana de haber sido diagnosticado con el coronavirus que ha matado a más de 210 000 estadounidenses. Su doctor alegó que el presidente ha “completado su tratamiento” para la enfermedad.
El mandatario no ha sido visto en público — más allá de en los videos producidos por la Casa Blanca — desde que el lunes regresó del hospital militar donde recibió tratamientos experimentales contra el virus.
Su médico, el comandante de la Marina Sean Conley, dijo en un informe el jueves que Trump podría regresar de forma segura “a los compromisos públicos” el sábado, mientras que el presidente trata de poner la atención en las elecciones, para las que quedan cuatro semanas, aunque millones de votantes están enviando ya sus boletas anticipadas.
Trump se niega a participar en el segundo debate presidencial en Miami
Trump cree que ya no es contagioso, pero las preocupaciones sobre la infección parecieron alterar los planes para el debate presidencial de la próxima semana.
“Me siento bien, realmente bien. Creo que perfecto”, dijo Trump durante una entrevista telefónica con Fox Business, la primera desde su estancia de tres días en el hospital. “Creo que estoy mejor, al punto de que me encantaría estar en un mitin esta noche”. “No creo que sea contagioso en absoluto”, agregó.
Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) dicen que se puede abandonar la cuarentena 10 días después de la aparición de los síntomas, que en el caso de Trump fue el 1 de octubre, según sus médicos. Conley apuntó que esto supone que Trump, quien ha estado rodeado del menor personal posible mientras trabaja desde la residencia de la Casa Blanca y la Oficina Oval, podría volver a tener una agenda pública el sábado.
Trump no mostraba síntomas de que su enfermedad avanzase ni de reacciones adversas al agresivo tratamiento prescrito por sus doctores agregó.
A principios de semana, los médicos del mandatario insinuaron que colaborarían estrechamente con instalaciones de investigación médica del ejército y otros laboratorios en torno a una “prueba de diagnóstico avanzado” para determinar cuándo dejaría de ser contagioso, pero no se dieron a conocer más detalles.
El doctor Anthony Fauci, el principal experto en enfermedades infecciosas del gobierno, dijo que dos pruebas de PCR negativas con 24 horas de diferencia son un factor clave para determinar si alguien sigue siendo contagioso.
“Así que si el presidente pasa 10 días sin síntomas, y le practican las pruebas de las que hablamos, entonces se puede asumir, basándose en ciencia sólida, que no está infectado”, dijo Fauci el jueves a MSNBC.
Aunque los reportes de reinfección son poco habituales, los CDC recomiendan que quienes superan el COVID-19 sigan llevando mascarilla y mantengan la distancia de seguridad, entre otras precauciones. No estuvo claro si Trump, que ha evitado la mascarilla en la mayoría de sus salidas, cumplirá esos lineamientos.
La Casa Blanca, por su parte, siguió negándose a compartir la fecha de la última prueba negativa de Trump, lo que ayudaría a determinar cuándo se contagió. La directora de estrategia de comunicación, Alyssa Farah, dijo que esa información era su “historia médico privado”.
La campaña de Trump y la Casa Blanca estaban trazando planes para que el presidente reanude los actos electorales, con la vista puesta en Pensilvania el lunes y Michigann el martes, antes de lo que tendría que haber sido el debate del próximo jueves.
Pero la Comisión de Debates Presidenciales anunció que el evento se celebraría de forma “virtual” para “proteger la salud y la seguridad de todos los implicados”. Trump rechazó rápidamente esa oferta y su equipo llamó más tarde a la comisión para demorar los dos últimos debates y aliviar así las preocupaciones acerca de cualquier contacto personal.