Donald Trump está luchando a brazo partido para lograr una absolución que pasa por el perdón de sus “deslices” políticos y legales.
Este jueves presentó un recurso de apelación ante la Corte Suprema para lograr mantener a la sombra los documentos sobre el ataque al Capitolio del pasado 6 de enero, en el que murieron cinco personas, y que se encuentran en poder de los Archivos Nacionales. Se trata en muchos casos de documentación generada por su propia administración.
El objetivo es evitar que esos documentos lleguen a manos del comité del Congreso que investiga la invasión del Capitolio el 6 de enero pasado, un golpe de Estado fracasado. Se desconocen sus contenidos, se asume que son correos electrónicos, borradores de discursos y registros de visitantes a la Casa Blanca
.Trump ahora afirma que como ex presidente tiene derecho a reclamar privilegios ejecutivos sobre estos documentos, alegando que su liberación dañará la presidencia de Estados Unidos en el futuro. Se supone que, por ley, su privilegio ejecutivo terminó con el final de su mandato y solo puede ser aplicado si Biden lo autoriza. El presidente ha dicho que no piensa complacer a Trump porque los documentos son de interés público y no están cubiertos por el privilegio ejecutivo.
La comisión de investigación del Congreso argumenta que resultan fundamentales para comprender lo que sucedió en el ataque al Capitolio, cuando los partidarios de Trump buscaron interrumpir la validación de los resultados de las elecciones presidenciales de 2020, que dieron la victoria a Biden.
Se espera una liberación de los documentos en las primeras semanas del año que viene.