El alto representante de la Unión Europea (UE) para la Política Exterior, Josep Borrell, afirmó este miércoles que la decisión del expresidente estadounidense Donald Trump de suspender las remesas de familias cubanas influye en la situación por la que han estallado protestas en la Isla.
“Si queremos ser sinceros y queremos saber las cosas como son, esta situación que se ha ido empeorando dramáticamente en los últimos meses, también tiene que ver con decisiones que tomó el señor Trump en los últimos días de su mandato”, indicó Borrell en una comparecencia rutinaria ante la Comisión de Asuntos Exteriores del Parlamento Europeo.
En concreto, se refirió a la medida de “prohibir que las familias en Miami mandaran, como venían haciendo desde años, transferencias a sus familias en Cuba”.
“Eso significa cortar, de la noche a la mañana, muchos recursos que recibían las familias cubanas, por una decisión de la Administración americana saliente tomada en los últimos días de su mandato”, apuntó.
Para el alto representante comunitario, “eso también tiene una influencia. Señaló que en la Isla “la situación es dramática, carecen en este momento de jeringuillas, medicinas, de combustible”.
“Nunca ha sido fácil, pero en este momento es más difícil y es natural que haya momentos en los que la situación social y económica tan tensa provoque movimientos de protesta”, opinó.
Borrell afirmó que “en Cuba hay problemas políticos, pero también hay problemas derivados de decisiones políticas tomadas por otros que afectan dramáticamente a la población y que yo ciertamente no apoyo”.
Además recordó que la UE, “todos los años, en las Naciones Unidas, pide que se levante el bloqueo estadounidense a Cuba”, y aseguró que volverá a ser el caso en la próxima Asamblea General de la organización en septiembre.
En cambio, lamentó que, “en vez de suspenderlo, el señor Trump, antes de irse, decidió suspender la posibilidad de enviar remesas familiares a Cuba”.
“¿Esto no tiene algo que ver también con que la situación económica empeore? Pues claro”, agregó.
Borrell recordó que el pasado día 12 aludió a la situación en Cuba durante un Consejo de ministros de Exteriores de la UE, y que a continuación instó al Gobierno cubano a “permitir el ejercicio de los derechos fundamentales de los ciudadanos, la libre manifestación y la pacífica demostración”.
También a que “atendiera sus quejas, que atendiera sus problemas, y que no hubiera una represión violenta”.
Borrell aseguró que la UE está siguiendo la situación y argumentó que “todo no se resuelve a través de megáfonos, o haciendo comunicados”, ya que “hay mucho trabajo que se hace, y se hace mejor, a través de los contactos personales”.
Las protestas en Cuba comenzaron el pasado domingo con gritos de “libertad” en las calles, tras lo que el Gobierno del país cortó internet, reforzó el control policial y acusó a Estados Unidos de financiar el estallido social.