Las autoridades francesas prohibieron a los propietarios de un oso enfermo seguir exhibiéndolo en espectáculos itinerantes, después de que una inspección determinó que padecía problemas de salud graves y que estaba recluido en condiciones precarias.
La medida excepcional de parte del Ministerio de Medio Ambiente anunciada el viernes fue consecuencia de las denuncias de varios grupos de defensa de los derechos de los animales sobre el tratamiento de Mischa, un oso macho adulto que era exhibido en ferias tipo medieval y espectáculos privados en toda Francia.
Una declaración del ministerio dijo que los veterinarios atendieron a Mischa después de realizarle exámenes de salud a principios de la semana. A sus dos propietarios se les ordenó que se aseguraran de que gozará de una atención veterinaria adecuada.
Se realizará otra inspección en cinco días para asegurarse de que se cumpla la orden. Si no, el oso podría ser confiscado, dijo el ministerio.
Un video de la asociación Aves Francia mostró a Mischa en un espectáculo el domingo pasado en el norte de Francia, en el que se veía físicamente débil y con dificultades para caminar.
Arnauld Lhomme, a cargo de las investigaciones de la fundación 30 Million Friends, dijo a The Associated Press que los grupos franceses de protección animal conocen el caso de Mischa desde hace años.
Los dueños del oso han recibido autorización en Francia para comprar y poseer osos desde hace años, pero su empresa se declaró en quiebra el año pasado, dijo Lhomme. Los entrenadores tienen tres osos pardos, pero sólo uno, Mischa, es lo suficientemente dócil para espectáculos.
Una petición en línea realizada por One Voice, un grupo de defensa de los derechos de los animales, exhorta a que los tres osos sean rescatados de sus encierros. Ha sido firmada por 36.000 personas.
Lhomme dijo que es muy escéptico sobre la determinación de las autoridades francesas de proteger realmente a Mischa, y criticó el plazo de cinco días que le concedieron a sus propietarios.