Portugal y España declararon el alerta ante una ola de calor intenso que ha estado a punto de batir los récords de temperatura en los dos países del sur de Europa.
Las altas temperaturas contribuyeron a la muerte de dos hombres en España el viernes, uno en Barcelona y el otro en Murcia, informaron las autoridades. El calor extremo, causado por in influjo de aire caliente de África, traía además polvo del desierto de Sahara.
Portugal emitió alertas rojas para más de la mitad del país, con temperaturas que llegaban casi a 46 grados Celsius. El récord de temperatura alta en el país es de 47,4 C registrado en 2003.
El presidente portugués Marcelo Rebelo de Sousa advirtió que se trata de “una situación muy grave de calor extremo”.
España emitió igualmente alertas de calor extremo para su región sur, con temperaturas que pudieran llegar a 45 Celsius en las ciudades de Sevilla, Huelva, Badajoz y Córdoba. El récord histórico para España fue fijado en Córdoba en julio del 2017, con 46,9 Celsius.
En el sur de Portugal, la ciudad de Evora estaba virtualmente paralizada el sábado, con apenas unos pocos turistas extranjeros aventurándose a tomar fotos de las ruinas romanas del Templo de Diana.
“Es terrible”, dijo el turista Paul Snell. “Somos de Canadá y nunca sentimos un calor semejante. Estamos empapados. Tengo que beber constantemente”.
El resto de España, incluso la región noroccidental de Galicia, de clima templado, era castigado también por el calor.
La ola de calor llegó el viernes, rompiendo marcas locales en ocho puntos en Portugal, donde las condiciones secas han causado varios incendios forestales.
Casi 700 bomberos y 10 aeronaves rociadoras de agua combatían el peor siniestro, que ha quemado 1,000 hectáreas cerca de la ciudad de Monchique, en la sureña ciudad de Algarve.
La Organización Mundial de Meteorología dice que el récord de calor para Europa es de 48 Celsius, registrado en Grecia en 1977.
AP / OnCuba