Primeras bajas para Israel en su campaña en el Líbano. Ocho soldados murieron este miércoles en territorio libanés durante los primeros enfrentamientos con el grupo Hezbollah.
Siete fallecieron en dos incidentes por separado, informaron fuentes militares sin dar más detalles. Horas antes, el ejército había informado el deceso de un capitán de 22 años, el primero en morir en la incursión en el Líbano, reseñó un despacho de Asociated Press (AP).
Mientras, el gobierno del primer ministro Benjamin Netanyahu calibra responder al ataque de Irán del martes. Unos 200 misiles iraníes fueron lanzados desde el país persa a importantes objetivos militares israelíes, algunos de los cuales no fueron detenidos por el escudo antiaéreo israelí.
Teherán ha asegurado que su acción tuvo éxito y algunas fuentes aseguran que un número importante de proyectiles llegaron a impactar, mientras que Tel Aviv y Estados Unidos han calificado la operación como un fracaso y han ponderado la respuesta antiaérea israelí.
Por otro lado, el vocero de Hezbollah, Muhammad Afif, aseguró que los combatientes del grupo islámico habían chocado con tropas israelíes en varias localidades fronterizas, entre ellas Miskaf Am, Maroun al-Ras y Al- Odaisseh, repeliendo el avance de los invasores. La información fue recogida por la cadena satelital Al Mayadeen.
Este miércoles, el grupo libanés lanzó hacia el norte de Israel un centenar de cohetes, según confirmaron las autoridades de Tel Aviv.
Entretanto, casi 2 000 personas han muerto en ataques israelíes contra el Líbano, la mayoría desde el inicio de la campaña masiva de bombardeos del Estado judío hace dos semanas.
De acuerdo con un informe de la Presidencia del Consejo de Ministros publicado este miércoles y que reproduce la agencia EFE, al menos 1 928 personas han muerto y otras 8 704 han resultado heridas principalmente en el sur del Líbano y en los suburbios meridionales de Beirut conocidos como el Dahye, un importante bastión de Hezbollah en la capital.
A su vez, la intensa campaña de bombardeos israelíes ha provocado el desplazamiento de casi 1,2 millones de personas, de ellas cerca de 235 000 ciudadanos sirios. Unos 76 269 libaneses cruzaron la divisoria con Siria, la única salida posible por vía terrestre del Líbano puesto que la frontera sur linda con Israel.
Gaza, la matanza continúa
En la Franja de Gaza, al menos 51 personas murieron durante la noche de este miércoles en ataques israelíes en el sur, incluidos mujeres y niños, mientras el ejército sionista iniciaba nuevamente operaciones terrestres en la ciudad de Jan Yunis.
El Ministerio gazatí de Salud contabilizó 82 personas heridas durante las operaciones israelíes en la ruinosa localidad y precisó que entre los muertos había siete mujeres y 12 niños, el más pequeño de 22 meses, según los registros del hospital europeo enclavado en la zona.
Otras 23 personas, incluidos dos niños, murieron en ataques separados el martes por la noche en otros lugares de la Franja de Gaza, según los hospitales que recibieron los cuerpos.
“Las explosiones y proyectiles eran enormes”, dijo a The Associated Press Mahmoud al-Razd, un vecino que perdió a cuatro de sus familiares en los asaltos israelíes. “Se cree que hay mucha gente bajo los escombros y nadie puede sacarla”, añadió.
Israel emprendió este año una ofensiva de varias semanas en Jan Yunis que dejó en ruinas buena parte de la segunda ciudad más grande del enclave.
La invasión israelí al territorio palestino suma cerca de 42 000 palestinos muertos, según las autoridades locales de salud, que no distinguen entre combatientes y civiles, pero aseguran que poco más de la mitad son mujeres y niños.
El ejército israelí, por su parte, dice haber matado a más de 17 mil milicianos, sin presentar pruebas.
Durante la guerra, las fuerzas israelíes han regresado varias veces a zonas de Gaza donde antes habían combatido contra Hamas y otros grupos armados, y en las que los milicianos se han reagrupado.
Este miércoles, las brigadas Ezedin al Qasam, brazo armado del movimiento islamista palestino Hamás, reivindicaron su responsabilidad en un ataque con un fusil automático y un arma blanca en el que murieron siete personas el martes en Tel Aviv.
Irán no busca la guerra con Israel
Desde Catar, el presidente iraní, Masud Pezeshkian, reiteró que su país “no busca la guerra” con Israel después de que la potencia persa lanzara cerca de 200 misiles contra territorio israelí en represalia por la muerte de los líderes del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) y del partido-milicia chií Hezbollah, además de un alto comandante iraní.
Durante una rueda de prensa junto al emir de Qatar, Tamim bin Hamad al Zani, explicó Pezeshkian que Irán se ha visto “obligada a responder”, pero advirtió que si Israel replica, Teherán reaccionará “con más fiereza y dureza”.
Al hablar sobre el bombardeo iraní, el portavoz del ejército israelí, Peter Lerner, dijo que la entidad militar no publicará ningún dato al respecto a los daños causados por los ataques para no dar información a Irán al respecto.
Washington junto a Tel Aviv, sin fisuras ni objeciones
En Naciones Unidas, durante la reunión de emergencia del Consejo de Seguridad efectuada este miércoles, la embajadora de Estados Unidos ante la ONU, Linda Thomas-Greenfield, dejó claro que Washington “apoya totalmente, totalmente, totalmente a Israel”.
La embajadora no repartió las responsabilidades colectivas por la escalada de tensión en el terreno tras una serie de ataques y represalias entre Irán e Israel, como hicieron otros miembros del Consejo, y atribuyó la responsabilidad exclusivamente a Teherán.