A mí me gusta la lluvia, siempre y cuando la vea caer desde una ventana. Me gustaba también cuando era niño y me bañaba en el aguacero y chapoteaba en los charcos a no ser que tronara.
Me gusta cuando viajo en un auto y el agua resbala por el cristal de la ventanilla y distorsiona el paisaje. Me gusta, incluso, la fina llovizna que apenas moja, que más que mojar te besa la piel.
Me gustaba la lluvia de madrugada allá en la finca de mis abuelos, el olor del guano húmedo, el rítmico sonido de las gotas sobre el alero de zinc…
Lo que no soporto, lo que nunca he soportado, es la lluvia que me sorprende en medio de la calle y me moja los pies dentro de los zapatos. Esa tiene que ser, entre todas sensaciones que me molestan, la más molesta.
Esta ciudad no está preparada para la lluvia. Mucho menos para los aguaceros cerrados, como el del otro día. Las calles se inundan, los taxis no paran, las guaguas demoran más de lo habitual, la gente se aglomera en los portales y las paradas, los tragantes se tupen, la electricidad falla, hay derrumbes…
Para llegar a mi casa no hace mucho tuve que atravesar casi un río de aguas sucias y turbulentas: en eso se había convertido la calle principal de mi reparto. Me abandoné, dejé de cuidar mis zapatos. Me los hubiera quitado si no temiera pisar algo peligroso. Llegué hecho una calamidad…
Dice mi amigo Lester que La Habana lluviosa es una ciudad encantadora, hermosa y plástica, sueño de los fotógrafos. Puede ser. Él mismo, con una pequeña cámara, ha hecho fotos muy interesantes, como la que ilustra estas líneas. Pero mi talante romántico no llega a tanto. Yo no puedo hacer ni una sola foto con las medias húmedas.
jajaja, buen texto Yuris. Verdad q La Habana mojada es un ciudad distinta, más lenta y caótica.
La Habana si fue una ciudad preparada para las lluvias. Podias caminar todo Monte, Reina, Galiano bajo los portales, los tragantes funcionaban y6 las guaguas pasaban a menudo Solo que se ha dejado destruir esa infraestructura y ni siquiera bajo un portal hoy estas seguro pues si no te mojas te puede caer un pedazo de concreto.
¿Así que te gusta la lluvia cuando vas en un carro? Siempre y cuando no seas tú el chofer, porque ahí no la verías de forma tan poética.
Saludos yuri , hermano me pasa igual que a t,i solo soporto que llueva cuando no tengo que salir de casa,no me molesta mas que tenga que ir a trabajar y este lloviendo,mas que cuando estoy en cuba voy al trabajo en bicicleta,pero la lluvia me persigue, ahora estoy de misión medica en brasil,(soy medico) en remanga la tuerca como decimos los cubanosjjaja,,en un pueblucho casi a mil metros sobre el nivel del mar y no hay un bendito día que no llueva,jajjaj,y entonces no puedes moverte del lugar y aparece el gorrión , no es fácil,bueno hermano me gusto como siempre lo que escribes ,un saludo
Para cada cosa que la Naturaleza nos regala hay dos lecturas. Lo bueno es que a la Pachamama no le importa si lo disfrutas o lo padeces, ella es como es. Puedes quejarte por tus zapatos o sacar una foto increible, todo depende de ti.
Leyendo tu artículo Recordé: Vivía en el Cerro y trabajaba en el Vedado. Ahora no recuedo las cuadras que caminos siempre de madrugada a coger la 174 en Tulipán y Boyero, la que mas próxima me dejaba y desde el Calixto Gracias tenía que andar otras tantas o más hasta la escuela. Cuántas veces bajo la lluvia de allá para acá y de aquí para allá? Muchas!! Y que pena, sin unos zapatos que protegieran mis pies. Muchas veces llevé otras sandalias en la cartera y un paño para hacer un cambio y poder continuar con el cuerpo frío, muy frio! por la falta de un abrigo que calentará bien. En una ocasión por eso de la curioso que llvamos dentro y como dices apilonados en la parada donde, más llovía dentro que afuera, me detuve a observar los pues de las mujeres y me dio tristeza, todas calzandos sandalias todos mojados con los pies mojados. Conté mi sentir a mis compañeras… No recuerdo cual fue su reacción pero, si la mía de pesar de ese y todos los días en que, bajo vientos aciclonados, lluvias intensas de primavera o verano y en estos meses, no importaba la circunstancias, acudía a mi escuela bajo mi propia criterio: Los niños también van y no se pueden guardar una gaveta como un papel. Tu artículo me llevo a mis días bajo la lluvia sin sombillas, sin capa y pies caldo con sandalias pero aun así me encanta mi Habana, la de todos.
La Habana es La Habana, siempre se inunda cuando llueve mucho (en ciertos lugares), pero lluvia para y sale el sol y otra vez es !!! La Habana.!!!!!!!!!!!!, ( No he oido a nadie quejarse de las inundaciones en Miami Beach).
Eso es lo que más extraño de mi isla los aguaceros, donde siempre me dejaba mojar al salir de la escuela y que cuando tenía una oportunidad espera el buen aguacero para salir a caminar y hasta cofia botella en moto poq los carros me veían tan mojada que no me querían montar a su carro y como jugamos con los grandes charcos después que escampaba que lindo el clima de mi isla, pero sé que algún día bolbere s bañarme en un gran aguacero cubano.
Yuris, estamos igual, lo que no soporto de la lluvia es que se mojen y ensucien los pies, y lo peor, que por obligación deba pasar horas y horas con ellos húmedos dentro de los zapatos. Excepto eso, me encanta la lluvia, sobre todo, cuando antes de caer, trae ese olor a tierra mojada y luego, ese encantador sonido que produce cuando sobre las tejas de fibrocemento. No me ha tocado La Habana en estos tiempos lluviosos, solo la he visto en fotos y videos, y aunque para unos es una desdicha estas inundaciones y derrumbes, aun así, sigue siendo encantadora.
Yo no se si eres romántico o poeta pero me encanto como describirte tu gusto por la lluvia,pues soy fan de ella,me encanta verla caer desde mi habitación y atravez del cristal ,pero no me gusta estar mojada.disfrutaba en cojimar de verla caer.
No solo La Habana…, más de una ciudad es invadida por el caos con tan solo un aguacero; a pesar de eso yo también comparto el gusto por la lluvia y el desamor por los pies mojados. Buen texto…, entre líneas deja ver muchas más cosas. Saludos.
Si fuera lo único para lo que no está preparada esta ciudad. El pasado viernes mientras caía tan torrencial lluvia, pensé: si los americanos nos hubiesen invadido, solo con pipas de agua nos habrían derrotado. Una ciudad paralizada por el agua. ¿Dónde se ha visto algo igual? Ah sí, en los países que jamás han tenido un desarrollo… ni alcantarillas, ni desagües… en fin… ahora es en La Habana… pero para “mejorar aún las cosas” , lo bueno realmente viene cuando sale el sol y te das cuenta cuán destruida está la ciudad que te vio nacer… sin tan siquiera pasar por la guerra que ataña a tantos países
Estaran de acuerdo que nos pasa siempre: todos queremos aquello que no tenemos !
Es verdad que los aguaceros tropicales en Cuba son una leyenda que sorprende a màs de un visitante. Pero los cubanos estamos acostumbrados. Tan acostumbrados como los londinenses lo estan a la lluvia casi constante.
Al final, todo pasa. Y la ciudad se despierta tan humeda como una mujer à quien acabas de hacerle el amor. Y no se queja…
¿Recuerdan cuando eramos niños? Nada nos gustaba màs que jugar en los charcos sin importarnos cuán sucia estaba el agua o cuán mojados estabamos. Eramos libres y esa libertad nos importaba màs que nada en el mundo.
Entoncés, que es lo que nos molesta? Lo que “de verdad” nos molesta?
Gracias Yuris por este buen post.
Hay Yuris tu pudieras hacer cualquier cosa, con los pies secos o mojados, recuerdo el poema con sábanas que bueno…sin sábanas es igual.Bello artículo!!!Como todo lo que escribes!!!
En verdad todos los extremos son malos y esta vez como otras decla historia La Habana se mojo en extremo y eso causa daños a veces irreparables. Me gusta que llueva pues necesitamos esa bendicion de la naturaleza, esta vez Dios solo sabe que su naturaleza ha cambiado y que el hombre tambien tiene que ver con el cambio climatico.
Muy hermoso ..felicidades.Me ha gustado mucho; cualquier cubano hecha de menos nuestra isla ..es lo mas bello que pueda existir.en nuestro planeta .su sol.su naturaleza ; su mar trasparente y su arena mesclada con corazón..y el carácter del cubano…en fin las raíces van con la sangre..desde que nace asta que muere..asta el fin .
en ocasione spienso que Lester es el alter ego no real de Yuris Nórido, lo que lo hiciera más interesante como escritor
Escribes tan bonito, que el articul parece un poema…..saludos