¿Cuántas veces hemos escuchado la pregunta: cubano de dónde? Y luego, la expresión: ¡Hasta dónde hemos llegado los cubanos!
¿Cuántas veces nos hemos quedado atónitos, estupefactos, al descubrir que allí, en cualquier recóndito lugar del mundo llegó un cubano, estuvo allí, plantó bandera e hizo historia?
Si buscásemos, descubriríamos un sinnúmero de historias, batallas libradas y logros de algún cubano. Cubanos que han dejado huellas ante el paso del tiempo, el desarrollo y la evolución de tantas ciudades que han hecho suyas, que han convertido —de alguna forma— en un pedacito de Cuba en el exterior.
Nunca dejaremos de sorprendernos al descubrir, con orgullo, cada logro de un cubano.
Estas historias de sacrificios, perseverancia y triunfos no son exclusivas de cubanos emigrados a Estados Unidos, país donde reside la cantidad mayor de ellos.
¿Sabías que un cubano fue alcalde de Sidney? Los hermanos Sanguily Garritt eran tres. Dos de ellos fueron figuras de las Guerras de Independencia: Julio Sanguily, a quien se le recuerda no solo por su papel como General mambí, sino porque fue rescatado por la tropa comandada por el Mayor General Ignacio Agramonte en una acción de gran valor y pericia militar. Su hermano, el Coronel Manuel Sanguily, fue el único de los tres en vivir muchos años durante la República y presumir de cargos en la política. El menos conocido de los tres, Guillermo Sanguily, ya dedicado al comercio marítimo, llegó a Sydney después de una azarosa travesía y en esa ciudad australiana, se ganó el respeto de sus habitantes, quienes lo eligieron como su alcalde… Guillermo Sanguily Garritt, cubano de familia mambisa y alcalde de Sidney, Australia.
Un mulato cubano fue alcalde de París… Según diferentes fuentes, se llamaba Severiano de Heredia, nació en La Habana por el año 1836 y emigró de niño a Francia con su madre adoptiva. Por allá, progresó en la política y ocupó estratégicos puestos en la República hasta el primero de junio de 1879, en que fuera electo alcalde de París. El mulato, ¡Alcalde de París!, murió a los 64 años el 9 de febrero de 1901. Si pasas por la Ciudad Luz, no dejes de visitar el cementerio de Batignolles, donde reposan sus restos.
Sin dudas, los cubanos hemos hecho historia no solo en nuestro país. Como estas, hay otras muchas historias que llevan estampada una horma hecha en Cuba. En esta ocasión, redacto este Editorial desde la ciudad de Las Vegas, Nevada, donde conocí a otro cubano trabajador y triunfador, cuya sorprendente historia contaré en otra ocasión.