Twitter y sus usuarios agilizan la propagación de noticias falsas y las lleva a mucha más gente que las informaciones verídicas, según concluyó el más amplio estudio realizado hasta ahora del impacto noticioso de las redes sociales.
La investigación realizada por expertos del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) examinó más de 126,000 noticias tuiteadas millones de veces entre el 2006 y el final del 2016, antes de que Donald Trump asumiera la presidencia de Estados Unidos, pero durante la agria campaña electoral.
Como resultado, se halló que las “noticias falsas” volaron por Twitter “más lejos, más rápido, a más gente y con más impacto que la verdad en todas las categorías de información”, de acuerdo con el informe final publicado en la revista Science.
¿Por qué la información falsa es más viral? Un estudio impulsado por Twitter da las claves https://t.co/8RtVgwH2aA
— EL PAIS América (@elpais_america) 8 de marzo de 2018
“No importa desde qué punto de vista se mire, las noticias falsas ganan”, comentó Deb Roy, coautora del estudio y directora del Laboratorio de Máquinas Sociales del MIT.
Twitter financió el estudio pero no influyó en sus conclusiones, afirmaron los autores.
Los expertos calcularon que como promedio, una noticia falsa toma 10 horas para llegar a 1,500 usuarios de Twitter, comparado con 60 para una historia verídica. Además, en promedio las informaciones falsas llegan a un 35 por ciento de gente más que las historias ciertas.
Mientras que las noticias verdaderas casi nunca eran retuiteadas hasta llegar a 1.000 personas, el 1 por ciento de las noticias falsas más populares alcanzaron sin problema a 100,000.
Cuando los expertos examinaron el efecto cascada de un artículo, es decir la manera en que va de una persona a dos personas a tres y así sucesivamente como un árbol familiar, hallaron que las informaciones falsas se multiplican por 24 generaciones, mientras que las verdaderas con dificultad llegaban a 12.
Contra la manipulación
Las inquietudes sobre las informaciones falsas en internet se han intensificado en Estados Unidos a raíz de las acusaciones de que Rusia alentó la diseminación de falsedades en las redes sociales durante las elecciones del 2016, a fin de sembrar la discordia entre los ciudadanos y perjudicar a Hillary Clinton.
Las empresas de redes sociales han estado experimentando con algoritmos y con personas que sirvan de filtros, para tratar de eliminar los contenidos erróneos y la retórica abusiva en internet.
Hace pocos días Twitter anunció que iba a contratar a expertos ajenos para ayudarle a lidiar con el problema. Y esta semana, Facebook anunció una asociación con The Associated Press para identificar y desacreditar cualquier información falsa relacionada con las elecciones legislativas que se realizarán en noviembre en Estados Unidos.
“Hemos visto abuso, acoso, ejércitos de detractores, manipulación mediante bots, campañas de desinformación y contenidos que siembran la discordia”, tuiteó Jack Dorsey, cofundador y director general de Twitter.
“No estamos orgullosos de cómo la gente se ha aprovechado de nuestro servicio, ni de nuestra incapacidad de hacerle frente al problema con la urgencia necesaria”, agregó.
AP / OnCuba